Confesión - Fanfics de Harry Potter

Sonreía, él estaba seguro de que sus dos mejores amigos estaban encantados, el uno con el otro. Pero...¿Por qué Hermione no parecía interesada? ¿Acaso había algo más allí, adelante? Quizá ella era tímida.

Pero ese día, ella se confesaría. Ese día. Él sabía que Ron no amaba a Lavander. Que solo era un capricho tonto. Estaba seguro de que las cosas iban a componerse. Realmente, lo necesitaban. Ya era hora de un arreglo. Desesperantes sus peleas.

Resultaba tortuoso. ¡Para dementes! Pero ya Ron lo estaba imaginando. Hermione lo amaba...O quizá. Si, ella lo amaba y él esperaba por su declaración.

El partido de Quiddicth, había sido todo un éxito. Ron había ganado, como guardameta y él, como capitán. Nada podía salir mejor.

Claro, estaba la odiosa Lav Lav, como solía llamarla ella, en conjunto con Ginny. Pero claro, entendía por qué la odiaban.

Todo Gryffindor estaba reunido. Estaban listos para la celebración. Con una sonrisa, Harry palmeaba a su guardameta. Estaban tan felices, que ni cuenta se daban si la marca tenebrosa, estaba en el aire. En cualquier lugar.

¿Y qué importaba? Con una sonrisa, todo se aclaraba. Con felicidad, todo se alegraba. Ron era el centro de atención. Ya no tanto Harry Potter. Sino.

La nueva sensación.

- Entonces...¡La victoria del león, sobre la asquerosa serpiente rastrera!

- Todas las serpientes se arrastran- dijo Hermione, con mala educación. Los muchachos la obviaron y continuaron con su celebración.

- ¡Hey, miren! ¡Ron y Lavander se están besando!

Hermione ladeó la cabeza con un suspiro, con una mirada agria. Con mucho cuidado, Harry acarició su hombro. Ya era el momento justo.

- Díselo- dijo y Hermione, asintió con fuerza.

- ¡Un momento. Paren todo que tengo, una confesión que hacer!- gritó y todos la miraron. Ella tembló por un segundo- Se trata de Ron y de Harry.

- ¿Y a ella, que le dio?- preguntó Parvati con una mirada insegura.

- ¡Será mejor que huyas, Ron!- gimoteó Dean.

- ¡Estoy enamorada de Harry Potter!- gritó y el mundo se paró por un segundo. Esa no era la confesión que esperaba oír.

Ni esperaban verla muy valiente, diciéndoselo a los cuatro vientos. Sorprendente, demente. Seguramente.

"Enamorada de Harry Potter"