La Sala de los Espejos - Fanfics de Harry Potter

 

 

 

__________________LA SALA DE LOS ESPEJOS___________________


N/A: antes de comenzar con el ff me gustaría aclarar una cosa:

-Los signos ***serán para separar la historia principal por días, momentos, etc.
-Los signos ___ serán para separar los sueños o visiones de la historia principal.

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Desde hace muchos años, los magos y brujas se han preparado para el día de Halloween, todos pensando que era solo un día más en el que había que celebrar algo, sobre todo los fantasmas. Pero detrás de este día se halla un secreto que pocos conocen. Este día puede ser un día más, o el inicio de un reino de terror, solo separados por una puerta oculta en un misterioso lugar, y a la que solo tienen acceso unos pocos elegidos.

****
Faltaba un día para Halloween, pero nadie habría dicho que ese día era la víspera de una fiesta. Por los corredores de Hogwarts pasaba una gran cantidad de alumnos. La Biblioteca estaba a rebosar y en las salas comunes casi no quedaba espacio.

Harry, Ron y Hermione, como muchos más alumnos, estaban en la biblioteca haciendo todos los deberes que les habían mandado los profesores, que parecía que ese año no les querían dejar ni un solo día libre.

-¿Tienes las preguntas de Transformaciones, Hermione?- Ron caminaba hacia la mesa, dónde estaban Harry y Hermione haciendo las tareas de Pociones, con una montaña de libros.

-¡Ron, te he dicho mil veces que no pienso dejarte copiar!- El chico tropezó por la impresión y quedó enterrado bajo una montaña de libros.

Harry se acerco a su amigo mientras se reía y le quitó los libros de encima, un trabajo muy complicado porque habían muchísimos. Después de varios minutos, Ron se levantó del suelo, cogió los libros y los dejó desparramados por la mesa. Después cogió un pergamino y comenzó a escribir.

Mientras Ron era rescatado de los libros, Hermione se había acercado sigilosamente para coger uno muy distinto de los demás. Se titulaba El antiguo poder de Halloween. Parecía muy antiguo. Las letras, en relieve, estaban hechas de lo que parecía cristal. La chica podía verse reflejada en las letras, como en un espejo. Lo guardó en su mochila asegurándose de que nadie lo viera, y siguió escribiendo.

Ya era tarde cuando el trío salió de la Biblioteca. Cansados y doloridos por el peso de los libros, y por haber estado escribiendo durante toda la tarde, se dirigieron a los dormitorios.

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Caminaba por uno de los pasillos del castillo. Sabía por dónde iba, aunque, al mismo tiempo, ignoraba a dónde se dirigía.

Pasó por delante de cuadros, armaduras y estatuas, pero no se detuvo. Salió de Hogwarts y fue hacía el lago. Cada vez estaba mas cerca. Se adentró en el bosque. Los arbustos le arañaban los brazos y la cara, pero no sentía nada. Los rasguños desaparecían pocos segundos después.

No sabía cuanto tiempo había estado caminando, pero se acercaba cada vez más a su destino. Una gran roca surgió ante él poco después. Estaba en un claro del bosque, muy lejos del castillo. La roca se alzaba majestuosa en el centro del claro, plagado de flores de todo tipo, algo inusual en aquel lugar. Rodeó la piedra, tocándola con las dos manos, sintiendo como algo en ella lo llamaba y, al fin, lo encontró.

La roca comenzó a moverse lentamente hasta que dejó al descubierto unas escaleras que bajaban hacia las profundidades de la tierra. Comenzó a bajar. Unos minutos después, las escaleras acabaron en un pasadizo sin fin. En aquel lugar hacía frío y estaba muy oscuro, pero sentía como algo lo llamaba al final. Siguió caminando durante mucho tiempo, era imposible calcular cuanto, pero a lo lejos podía ver una luz. Estaba a punto de llegar, pero

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-¡Harry, despierta!-

El chico abrió los ojos y se encontró con una escena bastante rara. Ron dando saltitos por la habitación mientras intentaba ponerse un calcetín. Dean y Seamus miraban u catalogo de disfraces y Neville estaba de pie, junto a su cama. Había sido él quien lo había despertado.

Se vistió rápidamente y bajó con Ron a la sala común. Hermione ya estaba allí y miraba algo en el tablón de anuncios. Los dos chicos se acercaron y pudieron ver lo que pasaba.

-¡La fiesta va a ser de disfraces!- exclamó Ron- ¡Nos han dado todo el día libre para encontrar uno!-

-Por eso Dean y Seamus estaban mirando el catalogo de disfraces- inquirió Harry.

Después de una larga charla sobre la fiesta, el trío bajó a desayunar. El Gran Comedor estaba decorado con toda clase de cosas: calabazas huecas, murciélagos de verdad que revoloteaban por todo el lugar
, incluso los fantasmas habían contribuido, dedicándose a volar sobre las mesas, algunas veces, atravesando a los alumnos que estaban desayunando.

-Hola- una voz soñadora habló detrás de ellos- ¿Sabéis ya de qué os vais a disfrazar?-

Luna tenía el mismo aspecto de siempre. Habría podido pasar fácilmente por un disfraz.

-Pues
- comenzó Harry

-Después de desayunar vamos a ir a Hogsmeade a ver disfraces- lo cortó Hermione

Luna la miró fijamente durante unos segundos.

-Oh, vale. Entonces nos vemos esta noche- se despidió del trío y se fue con sus compañeras.

-¿Vamos?- preguntó Hermione

Después de desayunar, todos los alumnos se fueron a Hogsmeade. Todo el pueblo estaba decorado para la ocasión, con guirnaldas en forma de calabaza, brujitas de cartón pegadas a los escaparates.

Harry, Ron y Hermione se dirigieron hacia la única tienda de ropa que había en el pueblo. Estaba abarrotada de toda clase de gente. El trío fue hacia la zona dónde estaban los disfraces de Halloween. Quedaban muy pocos.

-Creo que hemos llegado un poco tarde- dijo Harry mientras cogía un disfraz de calabaza- No pienso disfrazarme de esto-

-¡Mira, Ron!- Hermione sacó algo del montón de ropa que había sobre una mesa- Este te puede servir-

Ron fue hacia su amiga e, inmediatamente después, pegó un grito que retumbó por toda la tienda.

-¡¿Pretendes que me ponga esto para Halloween?!- Hermione soltó una risita- ¡Un disfraz de araña! ¡Solo se te podía ocurrir a ti!-

-Bueno, ehhh, Ron, no está mal- Harry también sonrió- Te quedaría muy bien-

Ron meditó durante un rato, mirando a Harry, a Hermione y luego el disfraz.

-Esta bien, pero ¿Qué os pondréis vosotros?-

-Creo que tengo una idea-dijo Hermione pensativa-Solo nos hace falta
-

Cogió unas cuantas telas que había por allí y las fue poniendo en los brazos de Harry. Luego se fue a otra parte de la tienda y volvió unos minutos después con unas cuantas prendas de ropa.

-Hermione, ¿Qué
?- La chica hizo un gesto para que se callara.

Media hora después, los tres salieron de la tienda cargados con unas cuantas bolsas. Antes de volver a Hogwarts, pasaron por las Tres Escobas para tomarse una cerveza de mantequilla y entrar en calor. Fuera hacía bastante frío.

-¿Vas a decirnos para que es todo eso que has comprado?- preguntó Harry.

Hermione esbozó una sonrisa.

-Lo sabréis cuando lleguemos a Hogwarts-

******
-Venga, Hermione
-

-He dicho que no, Ron. Lo sabréis cuando estén terminados- Hermione miró al pelirrojo severamente.

El trío acababa de volver de Hogsmeade. Iban cargados con bolsas llenas de toda clase de objetos, además de los disfraces. Se dirigían a su sala común para prepararse para la fiesta de esa noche cuando


-¿Qué es eso de ahí?- preguntó Harry, interrumpiendo la discusión que acababa de surgir entre sus dos amigos.

-¿El qué?- preguntaron los dos a la vez.

El chico señaló hacia un rincón. Pero justo en ese momento, lo que había allí pasó volando por encima de ellos.

-¡En Hedwig!- exclamó Harry

-Parece como si quisiera
que la siguieras- dijo Hermione

Los tres corrieron detrás de la lechuza. Salieron a los terrenos del castillo. Cada vez estaban más cerca del bosque prohibido.

-¡No pensareis entrar ahí!, ¿verdad?-exclamó Ron, pero Hedwig comenzó a picotearles, por lo que desistió.

Caminaron durante mucho tiempo. Casi no les quedaban fuerzas para seguir andando. Por fin, se encontraron en un claro del bosque. Era muy diferente, como si no perteneciera a aquel lugar. Las flores crecían por todos lados y, en el centro había una gran roca.

-¡Un momento!-exclamó Harry- Esto
¡lo he visto antes! Lo he soñado. Esta noche-

-¿Qué es?- preguntó Hermione mientras se acercaba a la roca- Es como si no perteneciera al bosque-

-En mi sueño
tocaba la roca, y aparecían unas escaleras- Harry también fue hacia la roca y comenzó a tocarla, rodeándola.

De pronto, la roca dio una sacudida y comenzó a moverse lentamente, dejando a la vista unas escaleras.

-¡Vamos!- gritó Harry

Comenzaron a bajar las escaleras. Lentamente, pues todavía estaban cansados de la caminata por el bosque.

-¿Qué hora es?-preguntó Ron- Nos vamos a perder la fiesta-

-Tranquilo Ron. No creo que la vayan a suspender porque nosotros no estemos- dijo Hermione, burlándose- Todavía es mediodía-

Continuaron bajando hasta que llegaron al pasadizo que Harry había visto en su sueño. Todo estaba muy oscuro, y hacia un frió terrible. Hermione lo miraba todo con gran curiosidad mientras murmuraba cosas incomprensibles.

Pasaron minutos, horas, era imposible saber cuanto tiempo llevaban caminando. A lo lejos se podía ver una luz... Cada vez estaba más cerca. Más cerca. Más cerca. De pronto, el pasadizo acabó. Pasaron de la oscuridad total a una sala muy iluminada, pese a que solo podían ver una antorcha en una de las paredes. Estaba toda hecha de espejos. Espejos por las paredes, por el suelo, por el techo. Todo lleno de espejos.

-Esto, esto es
-Hermione miraba fascinada la habitación dónde se encontraban.

-¿Hermione?-preguntó Ron

-Esa roca
, ese pasadizo
¿Cómo no me he dado cuenta antes?- comenzó a rebuscar por las bolsas. Poco después encontró lo que buscaba. Sacó un libro viejo, muy antiguo. El título, El antiguo poder de Halloween, estaba en relieve. Las letras brillaban intensamente, como los espejos de la habitación.

-¿Qué pasa Hermione?- dijo Harry

La chica comenzó a pasar las páginas del libro, mientras sus amigos la miraban, perplejos. Al fin, se paró, por la mitad del libro.

-El día de Halloween se ha celebrado desde hace siglos, pero muy pocos saben el verdadero significado de este día. Hace miles de años, un día de luna llena, siete magos unieron sus fuerzas para encerrar una fuerza terrible que amenazaba el mundo. Construyeron una sala y la sellaron con su vida, entregándoles antes el secreto de su paradero a cuatro elegidos. Ellos tenían la misión de proteger la sala para que aquel mal no pudiera escapar
Desde entonces, los siete sabios, como se les conoció a partir de ese momento, revelan el secreto de la sala a aquellos con un alma pura, para que, siempre que haya luna llena el día de Halloween, retengan al mal que amenaza al mundo- Hermione volvió a recorrer la habitación con la mirada

-¿Y que tiene que ver eso con este lugar?- preguntó Harry

Hermione pasó unas cuantas páginas más del libro.

-Cuentan las leyendas que la sala esta iluminada con una sola antorcha. Los espejos reflejan su luz, haciendo que el lugar brille como el Sol mismo. Aunque se desconoce su verdadero paradero, se dice que la entrada al lugar está protegida con una roca sagrada, y que a su alrededor crecen miles de flores de todo tipo
¿No lo entiendes, Harry? Esta es la sala de los espejos y tu debes de ser uno de los elegidos, pero Ron y yo ¿Por qué estamos aquí? ¿También hemos sido elegidos por los siete sabios? Ron cogió el libro en la biblioteca. Y, cuando se cayó, yo lo guardé. Pero
¡yo vengo de una familia muggle!-

-Un momento- la interrumpió Ron- ¿No has dicho que los que eligen a los
los que tienen que guardar esto
eran los sabios esos? Que seas muggle no tendría nada que ver-

-Pero no sabemos si de verdad nosotros hemos sido elegidos, Ron. Solo acompañamos a Harry.

-Una pregunta, Hermione, ¿Qué se supone que tenemos que
?- Harry no pudo terminar la frase. De pronto, se sintió cansado. Sus ojos se cerraban. No podía mantenerse en pie.
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La sala de los espejos brillaba intensamente. Tres personas hablaban en el centro de la habitación. Luego, cada una fue hacia una pared diferente. Murmuraron algo a la vez, mientras levantaban algo con las manos. De cada esquina de la habitación surgieron cuatro rayos plateados, que se dirigieron al centro de la habitación

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-¡Harry! ¿Qué ha pasado?-

Ron y Hermione estaban inclinados, mirando al chico fijamente.

-Ya se lo que tenemos que hacer-

Les explicó lo que había visto. Los rayos plateados, lo que habían dicho. Todo.

-Entonces, ¡solo tenemos que hacer eso!- exclamó el pelirrojo.

-Pero, no se, algo no va bien. ¿No eran cuatro los elegidos? Nosotros somos tres. ¿Quién falta?- preguntó Hermione

Harry cogió el libro y, como había hecho antes su amiga, comenzó a pasar detenidamente las páginas.

-Ehh, aquí pone que desde hace siglos, los elegidos han variado en número- Harry cerró el libro- No creo que falte nadie-

-En ese caso, será mejor que nos demos prisa- dijo Hermione- Vamos a
-

-¡Alto ahí!- exclamaron dos voces desde la puesta, y segundos después aparecieron Bellatrix Lestrange y Lucius Malfoy.

-¡Apartaos!- dijo Bellatrix, adelantándose- Es hora de abrir la sala-

Malfoy levantó la varita amenazadoramente, mientras Bellatrix iba hacia los espejos.

-¡No!- gritó Hermione en un momento de descuido, cuando Malfoy había desviado la mirada a uno de los espejos.

-¡Cállate!- le espetó la mujer, y con un movimiento de la varita hizo aparecer unas cuerdas, que se enrollaron alrededor del cuerpo de Hermione.

-¿Qué podemos hacer?- susurró la chica-

-Ron, prepara tu varita. Cuando yo diga, desatas a Hermione. Mientras intentaré distraerles- dijo Harry, y el pelirrojo asintió con la cabeza.

-Esto
Harry- dijo Hermione- Yo
-

-¿Qué hacéis?- preguntó Malfoy, mirando a Harry directamente a los ojos- Será mejor que no intentéis escapar- señaló los espejos mientras movía la varita.

-Bien, cambio de planes. Cuando diga tres les atacamos los dos, Ron. Pero ten cuidado. No puede darle ningún hechizo a los espejos. Hay que llevarlos fuera- dirigió la mirada a los dos mortífagos- Hermione
¿podrás desatarte sola?-

-Ya estoy desatada- dijo- Bellatrix estaba demasiado obsesionada con los espejos y el encantamiento no le ha salido bien. Es lo que quería decirte antes-

-Bien, Hermione. Tú encárgate de desviar los hechizos para que no se rompa ningún espejo. ¿Preparados? Uno, dos
¡tres!- gritó.

Los dos mortífagos se quedaron paralizados por la sorpresa. Harry y Ron comenzaron a lanzar hechizos, con cuidado de que no dieran en los espejos. Malfoy y Bellatrix contraatacaban.

-¡Estais tratando de llevarnos fuera!- exclamó la mortífaga, sonriendo- Los niñitos tienen miedo de que se rompan los espejos- añadió en tono burlón- ¡Ja!-

Comenzó a lanzar hechizos por toda la sala, imitada por Malfoy. Hermione desviaba la mayoría, pero muchas veces necesitaba la ayuda de Harry y Ron, por lo que los mortífagos se adentraban cada vez más en la sala.

-¡Inmovilus!- gritó Hermione, apuntando hacia los mortífagos, que quedaron paralizados en el acto, lo que dio tiempo a los tres chicos para sacarlos fuera de la sala atados con cuerdas.

-¡Lumos!- exclamó Harry, y una luz surgió en el extremo de su varita, iluminando el oscuro pasadizo.

Los mortífagos recuperaron la movilidad segundos después, pero Hermione había hecho un buen trabajo con las cuerdas que los sujetaban y desatarse les costaría unos minutos mas.

Sin embargo, la puerta que separaba la sala de los espejos del pasadizo comenzó a cerrarse lentamente.

-No llegareis a tiempo- susurró Bellatrix. El trío la miró a ella primero, y después a la puerta. Corrieron con todas sus fuerzas hacia ella.

-¡El mal será liberado!- exclamó la mortífaga- No podréis detenerlo-

Las cuerdas soltaron a los dos mortífagos, pero parecían pensar que los tres chicos no llegarían a la puerta a tiempo, porque no se movieron. Sin embargo, se equivocaban. Harry, Ron y Hermione llegaron justo a tiempo y desaparecieron dentro de la sala.

-Ya no hay nada que hacer aquí, Bellatrix- dijo Malfoy, furioso- Nos tocará cargar con las consecuencias- dicho esto desapareció, seguido por su compañera.

*****
-¿Vamos?- preguntó Hermione señalando los espejos.

Harry asintió con la cabeza. Después se colocó frente a una de las paredes. Ron y Hermione lo imitaron. Todos a la vez, levantaron los brazos y murmuraron una oración. Unos cristales aparecieron entre sus manos. Después, cuatro rayos plateados surgieron de las esquinas de la habitación en dirección a los cristales, que se desplazaron hacia el centro de la habitación formando una pequeña torre. Harry cogió la antorcha de la pared y, con el fuego de esta, prendió la torre de cristal que se había formado.

-Hemos terminado- dijo- Volvamos a Hogwarts-

*****

Después de recorrer el camino que habían seguido para llegar al claro con la gran roca, y de unas cuantas pérdidas, llegaron a Hogwarts.

El trío se fue a su sala común. Cuando entraron, vieron a los demás Gryffindors, que iban de un lado para otro dando los últimos retoques a sus disfraces.

Hermione se fue al dormitorio de las chicas, mientras Harry y Ron subían, cargados con la mayoría de las bolsas, a su habitación.

-¡Es el mejor disfraz que habrías podido encontrar, Ron!-exclamó Harry cuando Ron quedó metido dentro del enorme disfraz de araña- Va a ser el mejor disfraz de todo Hogwarts, jajajaja-

-Mejor vamos a la sala común antes de que te mate
- dijo Ron- Tengo ganas de ver tu disfraz-

Hermione ya estaba allí cuando ellos bajaron. Llevaba una falda vieja y una camiseta un poco rota. Como adornos, llevaba un gran colgante de corchos de mantequilla y unos pendientes con forma de rabanitos. Por encima de su cabeza flotaba algo que, a primera vista, parecía un snorkack de cuernos arrugados.

-¿Os gusta?-preguntó, sin hacer caso a las risas descontroladas de los dos amigos- Le he pedido a Luna los
adornos-

-Ehh, Hermione
¿de que se supone que voy yo disfrazado?- preguntó Harry.

-¡Uy! Lo siento Harry. A ver... ¡Aquí esta!-sacó una maraña de telas oscuras de una bolsa- ¡Tu vas de Dementor!-

Harry cogió el disfraz y se lo puso encima de la túnica. Luego se colocó la capucha y realizó un pequeño encantamiento para que las cosas se volvieran frías a su alrededor.

-Creo que con esto sobra- dijo

Media hora después, los tres bajaron al Gran Comedor. Habían sustituido las mesas de las casas por una gran mesa repleta de comida para picar. Los demás alumnos comenzaban a llegar en ese momento. Dumbledore apareció vertido de La muerte; Snape llegó con un disfraz de payaso; Flitwick se disfrazó de Gigante, y McGonagall de hada.

-¿Truco o trato?- le preguntó Harry a Draco Malfoy, que entraba en el comedor en ese momento acompañado de Pansy.

Este puso una cara bastante rara, perfecta para la foto que sacó Colin Creevey, que pasaba por allí en aquel momento con su inseparable cámara de fotos en la mano.

-¡Es un foto genial Harry!- dijo mientras se alejaba.

A una señal del director, comenzó a sonar la música. Todos se reían, hacían bromas y bailaban. Hermione se acercó a la mesa para comer un poco y Peeves le tiró un tarro de mermelada encima y Hermione contraatacó tirándole un bol de palomitas. Harry se dedicó a asustar a sus compañeros, que huían de el como si fuera un dementor de carne y hueso, y Ron estaba sentado en un rincón, peleando con las cuatro patas de mentira que salían de su disfraz.

-¡Malditas patas! ¡No puedo mantenerme en pie por su culpa! ¡Tengo que ir agarrándolas todo el rato! Por eso el disfraz era tan barato- exclamó

-Eso no es nada Ron. ¡Mírame! Estoy chorreando y llena de mermelada. Como encuentre a Peeves
-dijo Hermione enfadada, que había ido a descansar un poco de su lucha de comida.

-¡Ahhh!- Harry pegó un grito al otro lado del Gran Comedor.

-¿Qué ha pasado?- preguntaron sus amigos, que habían corrido a dónde él estaba.

-¡Voy a matar a Dean!- exclamó. Tenía el disfraz lleno de nata por todas partes- ¿Dónde está? Ha puesto un globo de nata justo por donde yo estaba pasando
-

Cuando terminó la fiesta, los alumnos volvieron a sus salas comunes, deseando continuar allí. Harry, Ron y Hermione salieron del Gran Comedor muy diferentes de cómo habían entrado. Hermione estaba empapada y llena de mermelada. Harry parecía una tela arrugada y su disfraz estaba lleno de nata por todas partes. Y Ron había arrancado las cuatro patas que sobresalían de su disfraz de araña.

-Definitivamente-dijo Hermione- Esta ha sido la fiesta de Halloween más divertida desde que estamos en Hogwarts.

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Espero que les haya gustado el fic!

Aura_90







 

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2024-05-19

 

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