Marticienta
Había una vez una familia de ricos, vivían muy felices con todos sus lujos y servicios. El padre era Max, él era un diseñador de modas, la madre se llamaba Marina, que en realidad nunca hacía nada, la hija menor se llamaba Kelly y la hija mayor era Jazmin.
Jazmin era muy feliz y creída. Se creía lo mejor del mundo, obvio porque tenía un novio guapísimo, Faustino. Faustino trabajaba en
en realidad nunca se supo, no sé porque, el caso es que era el novio perfecto.
- ¡Martina! ¡Martina! -gritaba Jazmin a las 8:00 a.m. como de costumbre.
- Ya voy, ya voy, señorita -le respondió Martina, que por cierto ella era la sirvienta de la casa.
- Apúrate con mi desayuno, ¡que no tarda en llagar Faustino! -le volvió a gritar-, que por cierto creo que hoy me pedirá matrimonio.
- Si ya estoy
aquí -dijo Martina con su último aliento-. Aquí está.
Ding, dong. Se escuchó el timbre de la puerta abajo.
- Ya voy, ya voy -decía Martina con todas sus fuerzas, iba a abrir la puerta.
- Si, estoy buscando a Jazmin -dijo un hombre al abrirse la puerta.
- ¿Departe de quien? -inquirió Martina.
- ¿Nome reconoces? Soy Faustino -le respondió el hombre.
- Oh si, si, claro, por supuesto, la señorita lo esta esperando, ¡suba!
- Ok -y subió a la recámara.
Al entrar a la recámara.
- Oh Faustino, mi amor llegaste -dijo Jazmin-, ahora, ¿qué querías decirme tan importante? -haciéndose la que no sabía nada.
- Ehhh
bueno lo que vine a decirte es que
-empezó a decir.
- Ah don Faustino, don Faustino -dijo una voz muy aguda-, don Faustino -era la hermana menor de Jazmin: Kelly.
- Ash vete de acá, ¿no ves que Faustino me va a decir algo muy importante? -replicó Jazmin.
- Eh
bueno -interrumpió Faustino-, prefiero que me digas Fausti
- Bueno, Fausti va a decirme algo muy importante, ¿verdad mi amor? -Jazmin le hizo ojitos a su novio.
- ¡Fausti! -replicó Faustino.
- ¡Pero si yo me quiero quedar aquí! -gritó Kelly.
- No , tu no te quedas! -chilló Jazmin.
- ¡Que si!
- ¡No!
- ¡Que si!
- ¡Que no!
- Bueno creo que regreso después -dijo Fausti algo incómodo.
- No, no, mi amor, eh Fausti, no te vallas. Mi hermana ya se iba.
- ¡Que no!
- ¡Que si!
- ¡Que no!
- ¡Que si!
Faustino, solo se fue.
- ¡Mamá, papá! -gritó Jazmin.
- ¿Y ahora qué? -respondieron sus padres, que acababan de entrar a la habitación aún con el pijama.
- ¡Mi hermana, mi queridísima hermana no se quería ir de mi cuarto, y no dejó que Faustino, hum, Fausti me dijera lo
que
me
iba a decir!
- Oh Kelly -dijo Max-, eso no se hace, que tal que le iba a pedir matrimonio. Piénsalo, se casan y se van a vivir juntos, a otro lugar. Ya no veras a Jazmin
y yo tampoco -añadió con voz más baja.
- Cierto, cierto -respondió Kelly-. No los volveré a interrumpir -dijo y se fue cantando y bailando.
- Bueno -dijo Max-, yo me voy, ¡que tengo un desfile de modas que organizar! -y también salió, junto con Marina.
A la mañana siguiente:
- Don Faustino, don Faustino! -dijo Martina- suba, suba, la señorita Jazmin lo espera.
- Si ya subo -respondió Fausti.
- Oh mi amor
Fausti viniste otra vez -Jazmin estaba emocionada. Trámites de notarias un USA para hispanos
- Si bueno, es que es muy importante lo que te tengo que decir
- ¡Y bueno que esperas! -lo alentó- ¡Empieza ya!
- Es
tá bien. Bueno lo que te tengo que decir es
ay como explicarlo
hum.
- Ya no digas nada más. Ya sé que me quieres pedir matrimonio. -Jazmin no se pudo contener.
Toc, toc se escuchó la puerta.
- Les traigo bocadillos y bebidas -se escuchó la voz de Martina del otro lado de la puerta.
- Si pasa, rápido -le contestó Jazmin, Martina entró y solo se dio cuenta de lo incómodamente que se la estaban pasando ahí- em, Martina, no ta vayas quiero que seas testigo de lo próximo que pasará. Fausti por favor prosigue.
- Está bien. Lo que quiero decirte es que
lo dire
ya voy
¿segura? Ok
yo
amo a una mujer
es muy linda y hermosa
la amo tanto
y me quiero casar con ella para vivir el resto de la vida a su lado -al decir eso no veía a Jazmin miraba en otra dirección como si estuviera ido, pero no lo estaba, miraba a algún lugar de la habitación, pero Jazmin no supo dónde, tal ve creía que era porque estaba muy nervioso.
- Ay Fausti, ¿por qué no solo me lo dices? ¿Por qué la indirecta?
- Según tu -puntualizó Fausti-. Pero es que no es para ti la "indirecta".
- ¿Qué? ¿Cómo dices? Si no es para mi, ¿para quien es? -chilló Jazmin.
- Bueno tu lo pediste. Es
para esa mujer -y al decir eso apuntó a la derecha de Jazmin.
- ¿A esa lámpara? Ni siquiera es una mujer, es un palo -estalló Jazmin.
- No, no -aclaró Fausti-. A ella. -y apuntó a Martina.
- ¿Qué a ella? -gritó Jazmin.
- ¿Yo? -se dijo Martina a sí misma, que no había dejado de escuchar aquella plática.
- Si. Ella es una mujer, ¿no?-explicó Fausti- ¿No eres hombre o si?-se dirigió a Martina.
- No, claro que no -respondió al instante.
- No, es una sirvienta, con un vestido de gata -replicó Jazmin.
- No le digas así a mi amorcito -le espetó Faustino.
- ¿Pero qué? ¿Desde cuándo la prefieres a ella?
- Desde siempre -respondió Martina.
- Tú que
¿quién te metió en esto? -le espetó Jazmin.
- ¡Que no la insultes! -le gritó Faustino
- Si, si, ya sé. Tu amorcito -se burló Jazmin, imitando la voz de su ex-novio.
- Yo la amo y me quiero casar con ella -prosiguió el otro como si Jazmin no hubiera dicho nada.
- ¿Yo? Faustino, estas seguro? Creí que solo eras amable conmigo porque eras un hombre considerado y educado -dijo Martina.
- No, no es así. Tú para mí eres más que una sirvienta. Tú no eres Martina ni nadie. Tu eres, ¡Marticienta! -dijo con mucho énfasis en la ultima palabra.
- ¿Oh, de verdad? ¿Soy como su cenicienta?
- Marticienta, querida, Marticienta.
- Oh, bueno, ¿en serio?
- Si, quiero casarme contigo y tener muchos hijos -dijo Faustino- ¿quieres casarte conmigo Martina?
- Oh señor, ay claro que acepto.
Desde ese momento Martina y Faustino vivieron felices por lo que quedó de sus vidas.
Jazmin se fue a Europa. Ahí se casó y divorció 2 veces y tuvo una hija, pero esa es otra historia.
Y los demás se quedaron como siempre.
FIN
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¿que les parecio? comenten plis!! :D
Marticienta [version corta] - Fanfics de Harry Potter
Había una vez una familia de ricos, vivían muy felices con todos sus lujos y servicios. El padre era Max, él era un diseñador de modas, la madre se llamaba
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2024-10-13
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