¡Maldita, Evans! Y todo lo que la rodea.
La maldije. ¿Cómo se le ocurría a esa colorina con cabeza de zanahoria haberme dado una poción para enamorarme de ella? Por que de eso estaba seguro. Si ella me atraía era solo por que me había dado algo. Si estaba obsesionado y pensaba todo el día en ella, era solo culpa de la maldita Evans por haberme embrujado. Por que yo soy un Merodeador y los Merodeadores no se enamoran. Y yo no era la excepción.
Pero yo estaba seguro en algo, Evans solo era un capricho más. Solo tenía que probar sus labios y ya se me quitaría esa maña que tenía hacía ella. Sin embargo, ¿Cómo lo haría para que me diera un beso? Ella no me quería ver ni en pintura, entonces, ¿Cómo le robaría un beso? Eso sería una misión imposible y a mi me encanta el peligro y el riesgo. Me encanta la adrenalina correr por mis venas, por eso me encantaba volar y ver como el cabello de Lily vuela al son del viento
. Pero, ¿Qué estoy diciendo? A mi no me gusta su pelo. Es muy rojo. Parece fuego y a mi no me gusta el fuego. Yo no quiero resultar quemado, si que no me gusta su pelo. Solo que
. ¡Están rojo que me hipnotiza! ¿Hipnotizar? ¿Qué estoy diciendo? Creo que haber dormido tan poco tiempo en al noche por culpa de Evans, no me hizo bien. Por que si, es culpa de esa colorida que yo no pueda dormir por las noches.
Pues, ¿Qué hombre no se preguntaría si las pecas que tiene en la cara también las tiene en otro lugar? Yo por lo menos me lo pregunto, ya que no soy un monje, por que mi amigo, mi compañero, mi socio, mi orgullo, mi virilidad, mi niño, mi tiburón o como quieran llamarlo ustedes, funciona muy bien. Endemoniadamente bien y solo necesita liberación. Pero, volviendo a mis dudas, ¿Evans tendrá pecas en su escote o en su espalda? Pues yo no lo se, pero me gustaría averiguarlo. ¡Claro que me encantaría! Soy hombre y a mi si que me encantaría saber eso. ¿Qué hombre no? Excepto algunos.
Bueno, como seguía diciendo, Evans es solo un capricho que me obsesiona, pero nada más. Yo no estoy enamorada de ella. No, señor, James Potter jamás se enamorará. ¡Y menos de una colorina o pelirroja! A mi me gustan las rubias o las castañas. ¡Hasta las morochas! Pero no las que tenían el pelo rojo. No, definitivamente ese no es mi color. Más encima ella parece árbol de pascua. El pelo rojo y los ojos verdes. Pareciera que ella estuviese siempre en navidad. Aunque, a mi me gusta la navidad. Pero desde ahora no, por que la navidad me recuerda a ella y yo no quiero pensar en Evans. Ya gasto demasiadas horas al día, por no decir todo el día, pensando en donde más tiene esas condenadas pecas, como para que me arruine también la navidad.
Hablando del verde, me encanta el caramelo verde, es mi obsesión. ¡Oh, no! Los ojos de Evans eran verdes y como a mi no me gusta el verde, por que es el color de sus ojos, cambiaré mi dulce preferido. Ahora simplemente me gustará el caramelo de color normal. Pero, ¿De que color era? Mm. ¡Así! Ahora lo recuerdo, es de color rojo
¡Oh, no! No puede ser rojo. A mi no me gusta el rojo. Si que, como mis dos colores preferidos están ocupados, tendré que elegir uno de ellos dos. Creo que el verde. Sip, el caramelo verde era más dulce que el rojo. Definitivamente, yo estaba obsesionado con ese caramelo.
Creo que me e desviado mucho del tema. Se preguntarán por que yo estaba maldiciendo a Lily, bueno, aparte de todo lo que dije contra ella y de no estar enamorado, fue por que ese día andaba con una falda más corta de la normal y me dejó sin respiración. Ojo que me dejó sin respiración por que nunca la había visto así, no por que me gustaba como se veía. Aunque
sus piernas eran
eran
¡Ya, lo admito! Sus piernas eran perfectas y desde ese día, lo único que puedo pensar en tocar la suavidad de ellas y verlas alrededor de mi cintura
Y mejor lo dejo hasta ahí, por que mis pensamientos depravados ya no tienen limites.
La cosa es que, cuando vi a Lily, quiero decir Evans, con esa falda casi me tuvieron que reanimar. Ojalas me hubiese ahogado y así Evans me habría dado respiración boca a boca. Mm
me la podría pasar tan genial y sería la primera vez que disfrutaría ahogándome. Si, creo que me voy a hogar, justo en frente de Evans para que esta me de respiración boca a boca. Pero lamentablemente, eso tendrá que esperar hasta mañana por que hoy es muy tarde y yo recién estoy alcanzando la Sala Común después de una incursión por las cocinas.
Entré en la famosa sala de los leones, los cuales son los mejores, y el panorama era aburridísimo. No había nadie. Estaba todo despejado, no había ni un alma en pena. ¿Dónde se habían metido todos? ¡Tan solo eran las 5 a.m. un día sábado! ¡Por Merlín, que eran aburridos todos! Con razón me fui a las cocina a buscar algo de comer. ¡Hasta el perro fastidioso y lleno de pulgas de Sirius estaba durmiendo ya! Cero panorama en ese lugar. Estaba apunto de irme, cuando escuché un ronquido en unos de los sillones. Había dos posibilidades: Que los sillones roncaban ahora o que alguien se había quedado dormido en ese lugar. Y eso era genial. Le podría hacer una broma a esa persona.
Con una sonrisa malvada en mis labios, me acerqué a ese lugar. Lo primero que vi fue unas largas piernas embutidas en unos pantalones con ositos de color rosa. Por lo menos ahora sabía que era una mujer, a menos que fuera un hombre que le gustaba vestirse como mujer. Seguí subiendo y me encontré con un hermoso trasero, el cual se me hacía muy conocido. Demasiado conocido. Una estrecha cintura fue lo tercero que vieron mis ojos y, sin poder esperar un segundo, subí un poquito más la vista. Casi me ahogué con la saliva. ¡Yo conocía esos senos! Los miraba casi todo el día. Y eran de
¡Oh, no! ¿Qué estaba haciendo Evans en ese lugar? ¡Yo que me estaba alejando y ella que se me aparece durmiendo como un angelito en uno de los sillones de la Sala Común! ¿Qué hacer? Ese era mi dilema ¡Pues, claro! Tengo que aprovechar de visualizar todos los rincones de ese cuerpo que me atormentaban en sueños ahora que ella estaba inocentemente dormida. Ahora era la oportunidad perfecta para ver si esas odiosas pecas existían en ese lugar tan encantador para un hombre.
Me acerque un poco más y me arrodillé al lado del sillón donde Evans dormía. Su cara estaba a tan solo unos centímetros de la mía. Y sus labios
¡Por Merlín! Sentí un cosquilleo en los míos por las enormes ganas que me habían dado por besar esos labios rojos, los cuales estaban entreabiertos y un poco húmedos. Estaban perfectos para ser besados. Sin embargo, tenía que alejarme de esa tentación. Ahora tenía algo mucho más importante que hacer. Por el bien de la ciencia y de mi propia conciencia depravada, tenía que saber ya si Lily, es decir, Evans, tenía pecas en sus senos.
Me relamí los labios, que por arte de magia se me habían resecados, y tragué saliva. ¿Era mi imaginación o la temperatura había subido varios grados? Acerque una mano temblorosa, ojo que estaba así no por que estuviese nervioso, sino que por que tenía miedo de ser pillado por Evans, y la fui acercando lentamente a la bata que cubría el secreto que tanto anhelaba saber.
Me volví a relamer los labios. Hacía demasiado calor en ese lugar. Mi mano tocó la V que formaba la bata y la abrí lentamente. Respira, James, respira. Me tuve que recordar cuando me quede en shock y mi corazón dejo de latir. ¡Lily no llevaba nada bajo la bata! Bueno, por lo menos en la parte de arriba. No había sostenes, ni camisetas, nada. Yo podría abrir perfectamente un poco más el batín y mirar todo lo que escondía Evans, pero no lo hice. No me pregunten por que, pues no tengo la menor idea. No se que me estaba pasando. Si hubiese sido cualquiera chica no habría desperdiciado semejante oportunidad. Sin embargo, era Evans y simplemente mi conciencia no me dejo actuar de acuerdo a mis instintos depravados.
Tragué saliva y fui sacando mis manos de la bata, mientras la iba juntando para que no se le viera nada. Yo no quería que ningún otro depravado pusiera las manos en ella. ¡Y eso no eran celos! Solo me comportaba como un caballero, para que otros depravados no pudieran acosarla. Pobrecita, era tan inocente. Y tan hermosa.
Me alejé un poco de ella y comencé a mirarla como dormía. Admito que ella es linda. Que me gusta su voz, su olor, su color de pelo, sus ojos, su piel, su sonrisa. Cuando esta enojada. Cuando me grita. Cuando esta concentrada. Cuando usa falda y muestra esas delgadas piernas que me encantan. Que me vuelven loco sus pecas. Y que me parte el corazón cuando la veo dormir. Pero eso no significa que yo este enamorado de ella. ¡No, señor! Yo no estaba enamorado de esa chica.
Le seguí mirando la cara y sentí mi corazón acelerar. Pero que conste que mi pulso se acelero no por mirarla a ella, sino que por la casi conmoción que recibí al mirar dentro de la bata de Lily, es decir, la maldita Evans. No se por que, pero por cada segundo que miraba la cara de Evans al dormir, mi pecho se llenaba de alegría y lo único que podía hacer era observarla, a pesar de que quería besarla hasta que mis labios estuvieran hinchados y no pudiese respirar. ¡Ojalas pudiese morir besando a Lily Evans!
Pero, de pronto, un deseo enorme me inundo mis pensamientos. Lily olía a caramelo verde. ¿Cómo lo sabía? Por que tenía mi nariz hundida en su cuello y por que ese es mi dulce preferido si que le conozco el sabor y su olor. ¡Oh, por Merlín! Quería morderle el cuello y saber si también este sabía a caramelo verde. Respira, James, Respira. El problema, es que entre más respiraba, más olor a caramelo verde llegaba a mis narices.
Desvié mi vista de su cuello y me fijé en sus labios. Ahora era mucho peor. Los labios de Evans estaban rojos y húmedos. Me acerqué un poco más y el aliento de ella llegó a cara. ¡OH, NO! Lily había comido caramelo verde antes de dormir y por eso olía a mi dulce preferido. ¡Necesitaba besarla!
Sin esperar un segundo más, cerré el espacio que había entre mis labios y los de ellas. Como me lo esperaba, Lily sabía a mi dulce preferido. Era la combinación perfecta para mí. El sabor de Lily y el de caramelo verde. Lentamente fui deslizando mis labios por los suyos. Mil descargas eléctricas recorrieron por mi cuerpo, pero eso era solo por que ella sabía a mi dulce preferido. Sin pode evitarlo, deslicé mi lengua por sus labios y probé su sabor. Mm. Caramelo verde.
Evans murmuró algo en sueños y me respondió el beso. Sentí que mi corazón iba a salir de mi pecho. Mi pulso se aceleró. Y sentí que me derretía bajo la caricia de ella. Sentí que mi deseo crecía a un nivel alarmante, cuando Lily pasó sus manos por mí cuello y se apegó más cerca de mí, haciendo que sus senos, esos senos que estaban desnudos bajo la bata, quedaran oprimidos a mi torso. ¡Por Merlín! Me tenía que alejar ahora mismo si quería seguir comportándome como un caballero.
Casi llorando por la angustia que me producía alejarme de ella, fui terminando el beso. Le besé la frente, conjuré una manta y la tapé hasta el cuello, mientras ella volvía a mormurar en sueños y seguía durmiendo como si nada hubiese sucedido. Ojalas para mi fuera tan sencillo. Ahora, por la culpa de ese beso, que consistía en comprobar si sabía a caramelo verde, estaba frustrado. MUY frustrado. Definitivamente tendría que darme una ducha de agua fría. Aunque, pensándolo bien. Creo que me tendría que bañar en el polo norte para que mi temperatura corporal se normalice.
La volví a mirar y con una sonrisa triste me alejé de ella. Aunque no lo quería admitir, Lily ya no era un capricho. Había probado sus labios y visto si tenía pecas en su escote, aun así esa chica me seguía obsesionando. Lily ahora no era una simple obsesión. Ahora era la obsesión de la cual estaba enamorado. Al igual que del caramelo verde. Mi combinación preferida.
Solo un capricho más. - Fanfics de Harry Potter
¡Maldita, Evans! Y todo lo que la rodea.La maldije. ¿Cómo se le ocurría a esa colorina con cabeza de zanahoria haberme dado una poción para enamorarme de
potterfics
es
https://potterfics.es/static/images/potterfics-solo-un-capricho-mas-2684-0.jpg
2024-10-07

El contenido original se encuentra en https://potterfics.com/historias/28879
Todos los derechos reservados para el autor del contenido original (en el enlace de la linea superior)
Si crees que alguno de los contenidos (texto, imagenes o multimedia) en esta página infringe tus derechos relativos a propiedad intelectual, marcas registradas o cualquier otro de tus derechos, por favor ponte en contacto con nosotros en el mail [email protected] y retiraremos este contenido inmediatamente