Era otro típico día, sonaba la alarma de mi reloj, estire mi brazo todo lo que pude hasta llegar al velador, tantee levemente con los dedos la superficie del mueble hasta que encontré un botón redondo que estaba encima del aparato, presione levemente y el pitido dejo de sonar, solo quedo el susurro de su eco...
Luego como siempre refregué despacio mis ojos y me estire todo lo que pude en la cama, como intentando darme el animo de levantarme, produje un sonoro bostezo y permití que mis manos de a poco fuesen abriendo las frazadas, para darles , a mis pies, el aviso de que ya era hora de moverse. Cuando mis dedos tocaron la baldosa fría, un estremecimiento recorrió mi espalda y una sensación extraña se apodero de mi pecho, pero no le quise prestar atención, así que seguí con mi rutina.
Me acerque con paso lento al armario, lo abrí y saque el uniforme recién planchado (gracias a mi madre) y los zapatos, para acomodarlos ordenadamente encima de la cama, tome la bata de baño que estaba colgada en la puerta de mi recamara y me diriji al baño, para quedarme bajo el agua caliente un largo rato...
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Ya había terminado de hacer todo, mi alcoba, los deberes para el colegio y había tomado un riquísimo almuerzo con mi madre, y estaba lista, así que me diriji hacia la puerta, saque una casaca para abrigarme y tome el bolso, donde llevaba mis cuadernos y uno que otro maquillaje. Me despedí con un sonoro beso y un afectuoso abrazo de mi madre y de mi hermana, luego salí casi corriendo pues al mirar el reloj me di cuenta de que se me hacia tarde.... casi me caigo cuando al cruzar la esquina vi como el autobús se estaba llendo, así que corrí a todo lo que dieron mis pies para alcanzarlo y por suerte lo conseguí, pero a medida que nos acercábamos al colegio de nuevo sentí esa sensación extraña, ahora si tenia una idea de que se trataba, pero me negaba a creerlo yo sabia que eso no podía ocurrir.
Así, con estos pensamientos atormentando mi cabeza, sin darme cuenta ya estaba con el delantal puesto, sentada en mi pupitre y con el cuaderno de la siguiente materia encima del banco... pero no le di mucha importancia y me dedique a mirar un punto inexistente en la muralla, como si fuera la cosa mas fascinante que hubiera visto en mi vida, hasta que senti un sonido, mas alla de mi subconciente el leve murmullo de una asilla al arrastrarse y la presencia de una persona sentada a un lado de mi banco... mire breve mente para identificar a la persona que se había sentado, cuando la reconocí no quise prestarle atención así que volví a mirar el punto de la muralla que tanto me fascinaba, pero aun así seguía escuchando su chillona e irritante voz a través de mis oídos... sentía unas ganas de decirle que se callara, que no me interesaba que le hubiera dado un beso a 5 chicos que no conocía, yo solo necesitaba a una amiga, a una insignificante persona que me escuchara, que calmara los pensamientos que me atormentaban, que me dijera que todo iba a estar bien,¡ es que acaso tenia que tener un cartel colgado en el cuello que dijera, que necesitaba a alguien !, pero me acorde que estaba en el colegio y que todas tenían su propia vida, ¿por que les importaría los problemas de otras personas?, yo hasta ese momento pensaba igual, pero ahora que eso me estaba pasando a mi lo encontraba egoísta y muy egocéntrico... Aparatos de masajes
No me había percatado de que el profesor ya había entrado en la sala, y que estaba esperando que me pusiera de pie para saludarlo, lo hice lentamente, como si mi cuerpo me pesara y al parecer el se dio cuenta de que algo me pasaba, porque me miro con pena y un poco de lastima, no quería que me viese de esa manera, así que corrí mi rostro para que no me mirara y me senté nuevamente, esperando que la clase acabara lo mas pronto posible, para poder volver a casa... Hasta que unos leves golpes en la puerta, no se por que, pero hicieron que toda mi atención se fijara en la menuda figura de la inspectora al entrar, en ese momento sentí que la opresión de mi pecho se hacia mas fuerte y dolorosa como si una cuchilla me estuviera atravesando una y otra vez sin parar, un nudo se formo en mi garganta, apenas respiraba cuando de sus delgados labios salio mi nombre.... en ese momento sentí que mi mundo se desvanecía y aunque no quería llorar sentía como pequeñas lagrimas caían por mis mejillas cada ves mas rápido, empapando por completo mi rostro, quería moverme pero mis piernas no respondían, vi la alarma en el rostro de la inspectora, que a paso lento y con los ojos mirándome con lastima como si entendiera el dolor que sentía en ese momento... llego a mi lado y poso una mano en mi hombro.
-¿a-a mu-mue-to?-pregunte casi en un susurro imperceptible y ella asintió....
yo no quería que sucediera, pero sucedió, mi abuela se murió, pero había que seguir viviendo y aquí estoy...
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bueno Javiera este es un fics dedicado a tu persona, espero que subas el animo y superes su muerte y también que yo allá logrado plasmar tus sentimientos en esta pagina, gracias por todo y que este bien
besos
vania
la muerte nunca sera bienvenida - Fanfics de Harry Potter
Era otro típico día, sonaba la alarma de mi reloj, estire mi brazo todo lo que pude hasta llegar al velador, tantee levemente con los dedos la superficie del
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2024-11-19
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