Lo extraño
No sé quién soy, ni de dónde vengo, tal vez tenga esposa ehijos pero la verdad, es que no lo sé. Lo único que sé es que hoy desperté enaquella vieja cama sin sábanas, ni almohadas; en un cuarto espantoso donde lassombras me persiguen, en donde el continuo rechinar del destartalado abanico enel techo, y el solitario bombillo intermitente ondeante, me hacen temblar de laincertidumbre. Donde las ratas y cucarachas caminan sin temor alguno, mientrasyo me pregunto que hago acostado sin ropa alguna.
Caminando por el cuarto, para explorarlo, veo una serie defotografías horrorosas, colgadas de cuerdas que llegan de extremo a extremo,mostrando cuerpos desnudos y sin vida. Esto me hizo pensar que tal vez sea unasesino o un retorcido investigador, pero en realidad no lo sé.
De pronto escuché una regadera abierta en el baño, voycorriendo hacia la puerta que me llevará a ese lugar con inodoros, espejos ydesechos fecales, para ver si había alguien que me explicara o respondieraaquellas preguntas que en mi cabeza rebotan. Cuando llegué, encontré una grantina rodeada por una delgada cortina blanca, veo la silueta de un cuerpo cuyacabeza descansaba contra el borde, no estaba solo. Cuando corrí la cortina eiba a preguntar donde estaba a quien quiera que fuera mi infortunadoacompañante, las vacías cavidades de un putrefacto cadáver sumergido en aquellatina con sangre me callaron, me sorprendí mucho porque esa escena ya la habíavisto antes.
Al instante corrí donde estaban las fotos, descolgué todas ycada una, buscando la tina sangrienta, la encontré y ahí esta. La misma imagen,la misma cortina blanca, los mismos ojos inexistentes, la misma mandíbulacolgando de unos jirones de carne. Tenía una escritura que decía Frank Mitchell,pero ningún recuerdo llegó a mi mente, no puedo recordar nada, nada de lo quepude haber hecho horas, minutos o segundos antes de encontrarme en tanperturbante lugar.
Seguí explorando, encontré otra puerta, la abrí, era uncuarto oscuro de donde emanaba un fuerte olor a putrefacción y sudor acumulado. Busqué el interruptor de luz, tapándome la nariz, para calmar mi intriga y loencontré. Cuando se encendieron las luces, una gran cantidad de cuerpos endescomposición, llenos de cucarachas y gusanos, con ratas pasando por encimasaltaron a mis ojos.
Me sorprendí tanto que empecé a vomitar y a llorar poresas imágenes, eran las mismas, todo era exactamente igual a las fotografías. No sabía dónde demonios estaba, no sabía como había llegado, pero lo que sabíaera que no estaría solo por mucho tiempo, esos cuerpos no pudieron apilarse unosobre otro por si solos, alguien los había matado y yo, de seguro, me lesuniría pronto. Las lágrimas salían de mi rostro como el agua de las cascadas,corrí de regreso al cuarto, había una pequeña ventana justo al lado de la cama,la quebraría y saldría de allí, mas tarde podría explicarle a la policía porqueme encontraron corriendo desnudo por la calle. Fulares Portabebes
Corrí la pequeñas cortinas y grite de frustración, ladrillosy metales, una pared de ladrillos detrás de unos barrotes de metal hacíanimposible mi escape. Llegué al punto de la locura por la desesperación,tambaleándome por el pequeño cuarto, enredándome con los hilos de lasfotografías, obligándome a caer al piso y lo peor, fue que encontré una foto conmi cadáver, lleno de sangre y en descomposición.
-Feliz Halloween, Herbie.
Me susurraron al oído, con un tono burlón y frío, mi asesinohabía llegado y el reluciente cuchillo de cocina se alzaba ante misdesencajados ojos, anunciándome mi muerte, anunciándome el fin de misdías.
-¿Quién eres tú?
-¿No me recuerdas Herbie? me siento ofendida, fui tu mejoraprendiz, tu mejor estudiante, tú me enseñaste todo lo que sé....
¿Estudiante? ¿Acaso era profesor? ¿Esa joven rubia fue enalgún momento estudiante mía? ¿Que clase de cosas enseñaba?
-¿Enseñarte qué?
-Todo Herbie, todo lo que ves, tú me enseñaste a ser lo quesoy. Tú lo dejaste, lo abandonaste, eso no está permitido Herbie, eres untraidor. Tu sentencia ya ha sido dictada, tienes que morir...
-¡¿Que, que dejé?! ¡¿De qué hablas?!
-Hace doce años nos conocimos, hace doce años fui tuestudiante, fui sumisa y obediente, pero ya no más. Ya soy mejor, lo viste porti mismo, las fotos, los cuerpos, estoy en la clase más alta y tu eres solo unrenegado inservible. Feliz Halloween Herbie, me tomó doce años superarte y metomará solo doce segundos matarte...
El filo del metal me atravesó, haciendo mi sangre brotardesde lo profundo, uno tras otro, gota tras gota, mi vida se agotaba...
-Siempre fui mejor, siempre lo fui, mejor que tu...padre.
Y lo extraño fue que, en los últimos segundos de mi vida,las memorias regresaron, mostrándome la verdad. Mostrándome a la niña andrajosaque recogí de la calle, la misma que le enseñé las artes de la precogniciónfotográfica, la misma niña a la que yo había dejado huérfana. La misma niña quehoy se vengaba de mí, con mi misma arma, mi misma cámara.
Lo extraño - Fanfics de Harry Potter
No sé quién soy, ni de dónde vengo, tal vez tenga esposa ehijos pero la verdad, es que no lo sé. Lo único que sé es que hoy desperté enaquella vieja cam
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2023-02-27
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